Viernes 28 de Julio, Los Discos de Farlonga

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Cada vez que el 86 pasaba por avda de mayo al 1200 por la puerta del cine Lara, hoy creo que sucursal del Banco Galicia no podía hacer otra cosa que mirar los posters que anuncian sábado trasnoche La Canción es la Misma, sería 1979-1980  y quería verla, pero con mis 12 años mis viejos no me iban a dejar ir. No creía conocer a Led Zeppelin pero quería estar allí, sobre todo cuando por alguna salida familiar pasábamos por allí, ver la fila de jóvenes cantando era atrapante.

Cuando llegue a los 15 en 1982 una noche mintiéndole a mis viejos me fui para el centro,, no me bajé en sarmiento y esmeralda, ni me pedí un paquete de pastillas Renome, pero para allá fui. Debo admitir que mi look de pantalones negros, borcegos, pelos parados no entraba muy en sincro con la estética del lugar, todos eramos pibes de los 80s los que acudian al ritual de ir a ver la peli estaban mas pegados a los 70s, nadie me bardio, nadie dijo nada y si decian algo, nadie era mas rápido que yo para correr con o sin borcegos.

La fila era una galería de distintos tipos de remeras con estampa de Led Zeppelin, creo que no había una repetida, Era la época que en los cines se fumaba, hasta en los aviones se fumaba, y podrán imaginarse que no solo se fumaba tabaco, quieras o no te ibas emporrado mal. 

Si no tenías te convidaban, mucha camaradería, hasta que entrabamos a la sala y había lugares que estaban como preasignados, recuerdo ver una discusión  por que una pareja había tenido la osadía de sentarse en el lugar de un mítico fan de la banda que se sentaba todos los sábados en esa ubicación. 

El ambiente era más de show que de película, y eso me sacaba, no soporto el ruido en el cine, pero no podía hacer nada eran ellos contra mí así´que me relaje, aunque debo admitir que una tensa calma recorría mi cuerpo

Se apagaron las luces y arrancó la peli en medio de aplausos, gritos y porros, una escena eterna de mafiosos con ametralladoras remington, la de Al capone, esas que parecen que tienen una lata de dulce de membrillo como cargador. Después escenas de Robert Plant tirado en un arroyo con su familia en la campiña inglesa y las chicas empezaban con sus suspiros. Hasta que empezaban a recibir cartas Plant, Page y el resto de la banda, sobre una gira que empezaba mañana, sepan que antes del Fax la gente se comunicaba por cartas que entregaba el correo, si era muy urgente un telegrama. Y después del viaje el arribo a NY y unas palomas que volaban lisergicamente por la pantalla, la llegada de la banda al Mitico Madison Square Garden, si uno mira hoy la película se queda sorprendido con la simpleza tamaño y despojado del escenario, la gira era del 76 pero había cambiado mucho el rock business.

De repente ante los primeros acordes del primer tema y no se si por influencia de las pastillas de colores que circulaban, los ácidos o el denso humo de paraguayo, me vi en un viaje en retroceso hacia mis 10 años y a una tarde en la que estaba jugando en la casa de Alejandra, una vecina hermosa rubia y 2 años mas grande que yo que tenia un hermano Daniel que era 5 años mas grande que yo y quien me despojó de japonesas cuando recien me mude al edificio mientras me enseñaba a jugar a las bolitas. 

Daniel tocaba la guitarra en grupos del barrio, pero esa tarde llegó corriendo se ubicó frente al equipo Ranser modular que tenían, se escuchó como los parlantes se iban preparando para sonar y el sonido mudo de ellos era cada vez más intenso. Puso un disco, acercó la púa y el la magia del picado del surco no tardò en sonar  hasta que estalló una batería, vaya forma de empezar un disco, no se si salte del empuje de los parlantes o del salvaje sonido, no estaba mi oído acostumbrado a ese salvajismo, de los Beatles, Bill Halley, Benny Goodman a esto había 20 decibeles y 200 beats más. la voz del cantante era aún más salvaje, pero me gustaba, no así a la Barbie de la hermana, pero me encantaba, termino el tema y lo puso de vuelta y fue por su guitarra para intentar sacar los acordes, pero fracasó y solo se limitó a decir es un dios un animal y el tema sonó en loop 3 o 4 veces hasta que por la insistencia de la Barbie ante la madre se acabó la música, Daniel no me devolvió las bolitas pero me hizo descubrir un sonido nuevo salvaje, pero interesante, a la noche le dije a mi viejo que quería el tema Rock and Roll y me dijo no es un tema es un tipo de música y no se habló más.

El gusto prepúber de Alejandra por los pibes hizo que en 2 semanas deje de hablarme, era un pendejo de 10 y no un sr de 13 y a Daniel lo debo haber visto en algún que otro show, en el que me hacía pasar ya había pagado bastante en mi infancia con las bolitas que eran bastante caras. Al volver al cine mentalmente ya estábamos atravesando momentos lisérgicos, suspiros primeros planos del bulto de plant, vestuaristicamente acomodado, y la apertura del techo para que el humo fugue un poco.

El tema «Rock and Roll» es de 1971 y forma  parte de su cuarto álbum llamado casualmente «Led Zeppelin IV», la letra no dice mucho más que

Ha sido un largo tiempo desde que rockeamos y rodamos,

Ha pasado un largo tiempo desde que te dejé ir.

Déjame volver, déjame volver,

Déjame volver, déjame volver.

Ha sido un largo, largo tiempo,

Un largo y solitario, solitario, solitario, solitario tiempo. Sí. 

Pero la letra no importa importa cómo arranca la batería,  los riff de guitarra, el solo  y la voz de Plant. 

Quizás como hecho más anecdótico de la película queda aclarar que se exhibió hasta diciembre del 89, durante 22 años una generación acudió a ese ritual de ver aunque sea en un cine a su banda favorita, quizás el cine o la película no estaban preparados para ver o vivir lo que serían culturalmente los 90s, dejenme pensarlo o imaginarlo asi.

Espero no haberlos aburrido con este viaje a mi infancia y a descubrir otras músicas, disfruten y hasta la próxima

Che Garcia, vos no habrás salido con Alejandra, no?? mira que se pudre todo